El verano es la estación del año con más presencia de rayos solares, esto además de causar las quemaduras y enrojecimientos ya conocidos, provoca una serie de reacciones a nivel dérmico que son esenciales para conocer y cuidar de nuestra piel.

Vamos a explicar un poco acerca de la composición de los rayos solares a los que estamos expuestos:

Los rayos solares están compuestos por dos tipos de rayos diferentes: UVA Y UVB.

Los rayos UVA  son aquellos que penetran  a capas profundas de la piel y provocan daños internos, mientras que los UVB son los que causan quemaduras y enrojecimientos en la piel de forma más externa

Cabe mencionar que ambos son por su parte anomalías, que son respondidas por la piel para protegerse del daño; un claro ejemplo son las hipercromías o comúnmente conocidas como manchas.

BLOQUEADORES SOLARES

Por buena fortuna tenemos productos cosméticos como los bloqueadores o protectores solares, que ayudan a limitar el paso de estos rayos solares

Los protectores solares son productos que permiten absorber o bloquear la radiación ultravioleta (UV) del sol, ayudando a proteger a personas de las quemaduras solares y a reducir el riesgo de cáncer de piel. Los protectores solares minerales, también denominados bloqueadores solares o protectores solares físicos, contienen ingredientes como el dióxido de titanio o el óxido de zinc y protegen la piel bloqueando los rayos UV dañinos del sol. Los protectores solares químicos contienen moléculas con carbono que absorben la luz solar, como oxibenzona, octinoxato, octisalato y avobenzona.

USOS Y BENEFICIOS

Cuando se usa según las instrucciones, el protector solar permite proteger contra quemaduras del sol, reduciendo el riesgo de contraer cáncer de piel y ayudando a prevenir los primeros síntomas de envejecimiento de la piel. Los protectores solares actúan proporcionando un “amplio espectro” de protección contra dos tipos de rayos ultravioleta (UV) dañinos: los rayos UVA y UVB.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. Recomienda usar protectores solares con un amplio espectro de protección UV y un factor de protección solar (SPF) de 15 o superior, para proteger contra el envejecimiento de la piel y el cáncer de piel, por mencionar algunos.

La Academia Estadounidense de Dermatología (AAD) afirma inequívocamente que “es seguro el uso del protector solar” y que “ningún estudio publicado demuestra que el protector solar sea tóxico para los humanos o peligroso para la salud humana». Para niños menores de 6 meses de edad, la AAD declara que los padres y cuidadores deben evitar usar protector solar, y en su lugar, proteger la piel de los bebés del sol cuidando que estén a la sombra y vistiéndolos con camisetas de mangas largas, pantalones y sombreros de alas anchas. Para niños de 6 meses de edad y mayores, la AAD recomienda a los padres que utilicen un protector solar que contenga dióxido de titanio u óxido de zinc, que protege la piel sensible de los bebés y niños pequeños.

Como ya pudimos ver, el uso de los bloqueadores solares es parte del cuidado tanto estético como de salud, el cáncer de piel es la consecuencia más grave que podemos tener por la exposición solar extrema

Entre otros de los aspectos estéticos poco favorables que se pueden presentar por la exposición solar son: arrugas más pronunciadas, flacidez agravada o prematura, e hipercromías o las típicas manchas que encontramos en zonas con exposición solar constante

Alginas recomendaciones para el uso de los bloqueadores solares son:

  • Usar productos bloqueadores por arriba del 50 fps
  • Replicarlos cada 1 hora a 1 hora y media para tener una protección más segura, ya que estos se van degradando con el sudor
  • Evitar el uso de estos cerca de los ojos, puede causar irritaciones

¡Para conocer más espera nuestra segunda emisión de contenido de este tema ¡

Lic. Gabriela Córdova Ávila
Profesora de la carrera de Cosmetología